El oscuro encanto del sionismo
Diálogo entre Israel Shamir y Saam Amerat, 7 de julio 2010
“Ya pasó la
fecha de vencimiento para tus argumentos, Shamir”: esta frase, en carta recibida
de un lector de Gran Bretaña, al que todavía no conocía, me resultó impactante.
He aquí lo que me escribía Saam Amerat:
“Hubo un tiempo
en que las organizaciones racistas eran antisionistas. En aquella época, los
antisionistas como tú podían contemplar la posibilidad de trabajar con ellos,
aun si esto significaba trabajar contra los antifascistas. Pero este tiempo ya
pasó. Los sionistas ya se han unido a los nazis, y los nazis se han vuelto
sionistas. Ahora vemos a los nazis caminar abrazados con sionistas por las
calles de Londres, ondean banderas israelíes en una mano y te hacen el saludo
nazi con la otra. Así que ya pasó la fecha de vencimiento para tus argumentos,
Shamir, y no te has dado cuenta.”
Shamir: Pues bien, Saam tiene la razón, hasta
cierto punto. El trasfondo político está cambiando, lo nuevo es el giro sionista
de la extrema derecha europea. En un tiempo, estaban en contra de los judíos, y
por lo tanto opuestos al proyecto sionista. Pero ahora han descubierto el oscuro
encanto del sionismo. Los partidos de extrema derecha con mayores éxitos en
Europa se agarran de Israel, les abren las puertas a los judíos, y ahora su
combate principal es contra los musulmanes y los inmigrantes. Lo que pasa es que
el antisionismo les cuesta demasiado caro – ya que se califica habitualmente a
los partidos antisionistas de extrema derecha como “neonazis antisemitas", lo
cual los arroja fuera del tablero, les quita acceso a los medios, así como
cualquier legitimidad. Y basta con que declaren un apoyo a Israel para volver a
la plena legitimidad.
Gianfranco Fini (un dirigente de la Alianza
Nacional italiana) descubrió esta solución hace tiempo. Siendo él fascista o no,
después de una visita a Israel y sacarse una foto con Sharon en el museo del
Holocausto, se volvió “koscher”, y ascendió a la cumbre.
En el Reino Unido, el BNP a su vez se volvió más
amigo de Israel. El BNP tiene en su dirigencia a algunos judíos y sionistas. Los
antisionistas Martin Webster, que fue dirigente del Frente Nacional, y Robert
Edwards, un dirigente del ala socialista del movimiento nacionalista, tienen
mucho menos dinero, menos cobertura mediática, y menos apoyo público.
En Suecia, la extrema derecha se ha dividido entre
prosionistas y antisionistas. Y ahora, algunos años después de la ruptura, los
demócratas prosionistas están a punto de entrar en el parlamento sueco, porque
los medios de propiedad judía han dejado de boicotearlos. Mientras tanto, los
Nacional-demócratas antisionistas son un grupo enclenque y boicoteado.
En Francia, Jean-Marie Le Pen ejerció tenazmente
una influencia antisionista, a pesar de que hay algunos judíos en posiciones
cumbres en su partido. Pero ahora el Viejo ya se dirige hacia la salida, y su
hija Marine, probable sucesora, parece dispuesta a cambiar esta prioridad por la
de la lucha contra musulmanes e inmigrantes. Los judíos trabajan para ello. Un
partidario de Marine Le Pen, Pierre Cassen, organizó hace poco un aperitivo
callejero, con el lema “¡vino y salchichón libres!” un viernes, a la hora del
rezo musulmán, en el área myoritariamente musulmana de Paris “La Goutte d'Or”
(el gobierno lo suspendió a última hora); en el acto fue
invitado a dar una conferencia por el Bnai Brith, la organización
sionista-masónica y fundadora de la Liga de Defensa judía (ADL) con ramas en
cada país.
La cosa es peor aún en Holanda y Dinamarca, donde
la extrema derecha es estrictamente sionista.
Saam Amerat: :
Te escribí aquello después de leer tu ensayo « Raza e Inmigración »
(http://www.israelshamir.net/Spanish/Raza.htm).
No era la primera vez que señalaba esa situación. Pienso que los sionistas se
dieron cuenta de que los inmigrantes en Occidente son propalestinos en vez de
ser prosionistas como se había previsto, y por eso los sionistas cambiaron de
posición.
Shamir: Pero para este tema también ya pasó la
fecha de vencimiento, como dices. Hubo una época en que la extrema derecha, los
llamados nazis, eran los únicos que estaban en contra de la idea de ayudar
generosamente a los inmigrantes. Hoy en día, la anterior posición minoritaria se
ha desbordado, nadie quiere más inmigrantes, ya todos los partidos buscan la
manera de frenar la inmigración, tanto a la derecha como a la izquierda, porque
es lo que quiere el pueblo.
La inmigración en
Europa no creció porque humanistas o trotzkystas, antifachos, feministas, gays,
o zurdos frenéticos la hayan alentado; El sueño de importar montones de
inmigrantes, implantar el matrimonio gay, y tener a la iglesia marginalizada se
ha cumplido porque los ricos y poderosos capitalistas y banqueros querían
despojar de su poder a la clase trabajadora, socavar la solidaridad, y hundir el
Estado de bienestar sobrecargando la nave. Los judíos ricos -que son una parte
importante e influyente de la casta de los ricos- tenían una visión ensanchada,
porque se sentían más cómodos y menos visibles, en una sociedad heterogénea. Y a
esto agregaban su aversión a la fe cristiana.
Ahora les resulta contraproducente. Europa no tiene
trabajo para los inmigrantes, los trabajadores están desempleados, el estado de
bienestar está a punto de estallar, y ni siquiera los judíos tienen ya interés
en la inmigración, porque los inmigrantes no son muy amantes de judíos.
En cuanto a mí, yo siempre pensé que la inmigración
masiva era un instrumento de los ricos en su combate contra la sociedad.
Consideraba que la extrema derecha tenía un argumento poderoso al oponerse a la
inmigración masiva, y aconsejé a la izquierda adoptar esta idea como parte del
paradigma izquierdista. De hecho, las sociedades comunistas, la Unión soviética
y Cuba, no permitieron ninguna inmigración masiva porque se preocupaban por sus
trabajadores. Pero ya este debate caducó: el Partido Laborista en Gran Bretaña
se opone con firmeza a la continuación de la inmigración masiva, y lo mismo vale
para Francia y el resto de Europa.
Saam Amerat: Lo que te decía es que la
alianza entre nazis y sionistas no es en realidad un cambio reciente. Los nazis
y los sionistas siempre han sido aliados, por mucho que lo ocultasen, no debería
sorprendernos, ya que parecería que se plagiaba a Theodor Herzl. Fíjate lo que
pasa con el sionismo: sustituye “el espacio vital” de Hitler por “Israel”, “la
raza aria” por “los judíos”, los” judíos” por “los amalecitas”, y los” eslavos”
por “los palestinos”, y ahí está el nazismo entero.
Theodor Herzl era ateo, o sea que el
sionismo para él era la creación de un mito para entusiasmar a los judíos, de la
misma forma que el nazismo es el mito que creó Alfred Rosenberg en su libro para
entusiasmar al pueblo alemán. El nazismo y el antisemitismo en general tienen
los mismos objetivos que el sionismo porque los antisemitas querían sacar a los
judíos de Europa, y los sionistas lo mismo.
De modo que a la gente no debería
sorprenderle que los banqueros sionistas yankis ayudasen a los nazis a tomar el
poder. No creo que lo que les pasó a los judíos después que Hitler tomó el poder
fuera para ellos el error, sino que era su objetivo. Necesitaban que los judíos
abandonaran sus patrias y se mudaran a Palestina, y era necesario que Hitler les
asustara, para poder lograrlo.
Así que tanto los sionistas locales como
Israel mismo se dedicaron a atacar judíos en el mundo entero, para regar el
terror y llevárselos a Israel. Haciéndoles la vida infernal en lo posible, se
les llevaba a considerar la vida en Palestina como algo paradisiaco... en lo
posible. Que los judíos fueran atacados por los nazis, esto fue el objetivo de
los sionistas, porque los sionistas querían desterrarlos a Palestina.
Los neonazis y otros antisemitas también
se percataron de que el sionismo podía limpiar de judíos sus propias naciones.
Les llevó algunas décadas comprender esto, porque no tienen fama de ser muy
listos.
Cuando los neonazis lo descubrieron, y
se convirtieron abiertamente en neosionistas, alguna gente en el campo de los
derechos de los palestinos se asustó, y otros se entristecieron. Yo
personalmente no sentí nada, porque yo siempre supe que estaban del mismo lado.
Lo que estaba oculto se volvió algo patente, pero ni se perdió ni se ganó nada.
Ahora bien, ya nada de esto importa hoy en día, porque los nazis han dejado de
pedirnos ayuda contra los judíos, mientras que los sionistas -que acusan a todos
los que se oponen a ellos de estar con los nazis- están ahora con los nazis. Las
cosas siempre han sido así, pero trataban hasta ahora de que la gente no lo
pudiese ver, esto es lo que creo yo.
Shamir: En los años 1930, los sionistas efectivamente tragaron de convencer a
los nazis que tenían el mismo objetivo, el de sacar a los judíos de Europa.
Muchos nazis aceptaron este argumento, y hubo mucha colaboración entre ellos.
Sin embargo, Adolf Hitler no lo creía. Él pensaba que los judíos querían
establecer una base territorial para sus operaciones, sin dejar de vivir y obrar
en Europa. La historia demostró que este punto de vista era más realista. Qué
duda cabe que los judíos viven muy bien en USA y en Gran Bretaña; no tratan de
mudarse a Israel, pero sí respaldan a Israel como parte y lastre imprescindible
dentro de sus planes. Israel ha mantenido en vida a la judería, pero la
actividad judía más importante sigue desarrollándose fuera de Israel. Goldman
Sachs no emigró a Israel, ni tampoco Zuckerman ni Foxman ni Lieberman. Prefieren
hacer dinero, combatir la Iglesia y limitar las libertades civiles en USA. De
modo que no es razonable pretender que los neonazis y otros antisemitas también
“se percataron de que el sionismo puede limpiar sus naciones de judíos”. Tal vez
“no tengan fama de ser muy listos”, pero no son tan tontos tampoco.
La extrema derecha europea no se hace ilusiones, no
cree que los sionistas sacarán a los judíos de Europa. Y no está sucediendo nada
por el estilo. Hicieron las paces con los judíos porque era su única posibilidad
para mantenerse dentro del sistema político existente. Los que no lo hicieron,
como Horst Mahler, están en la cárcel.
A mí personalmente, me interesaba la derecha
nacionalista europea porque este movimiento era menos obediente, menos temeroso
de los judíos, más franco en su apoyo a Palestina. El movimiento propalestino de
izquierda gastó mucho de su energía en discusiones sobre el antisemitismo. Los
sionistas se les infiltraron dondequiera. Tú vives en Inglaterra, de modo que
posiblemente conozcas a Tony Greenstein, a Roland Rance y a otros que pretenden
que luchan por Palestina, pero en realidad actúan como agentes
cripto-sionistas (ver al
respecto el debate entre Gilad Atzmon, Paul Eisen, Mary Rizzo, en el foro
shamireaders).
La extrema derecha no llegó a estar tan infiltrada, tenía una sólida tradición
antijudía, y rompió con muchos tabúes. Pero esto ya pasó. Sus dirigentes
pactaron con Satanás: y prefieren estar al lado de los sionistas contra los
musulmanes. Desgraciadamente, la derecha nacionalista siempre ha sido muy débil
en el plano moral. Esta debilidad la heredaron de Nietzche o tal vez aún de
Descartes, a través de Mussolini y Hitler. Aman la fuerza a la vez que aman sus
naciones, y dicen: mi nación por encima de todo, con razón o sin ella. Pero los
dirigentes oportunistas son su debilidad, como sucedió con muchos dirigentes
comunistas.
Sucede algo similar en Rusia. La derecha
nacionalista rusa era muy antijudía; ya no. Enamorados de la fuerza y la acción,
en realidad les encantó la chutzpah (el caradurismo nacional) israelí, su estilo
a lo fiera para embestir contra la Flotilla de la Libertad
Recordemos algunos hechos inapelables. Judíos y
árabes están por igual involucrados emocionalmente en la causa
israelo-palestina, pero los judíos gastan muchísimo más en ello que los árabes,
en Rusia como en todas partes. Árabes y musulmanes posiblemente no tengan en
conjunto menos dinero que los judíos, pero lo gastan en mezquitas o caballos. La
causa de Palestina es la más popular, la más conocida, pero aún en ese campo, la
inversión financiera de los árabes es magra. Europa gasta más, mucho más, pero
el dinero europeo va -con todo derecho- a la ayuda a los refugiados, no al
combate para conquistar mentes y corazones. Los judíos mandan conferenciantes a
cada universidad, a cada congreso, organizan encuentros, administran el discurso
en totalidad: no solamente en el tema de Palestina, pero Palestina forma parte
de su paradigma. Las embajadas del gobierno de Ramala tienden más bien a frenar
acciones de solidaridad y respaldo a Gaza, por su rivalidad con Hamas. La
situación actual es extremadamente peligrosa, y de lo que hagamos nosotros
depende la salida. Pero nuestras acciones están limitadas por nuestros recursos.
El hecho del cisma en la extrema derecha es una señal de esto mismo.
Saam Amerat: Que los nazis ataquen a los
judíos no es nuestro objetivo. Queremos que los judíos vivan felices para
siempre en sus países de nacimiento, de modo que las familias palestinas no se
vean expulsadas o exterminadas para abrirles un lugar en Palestina. Nuestro odio
al sionismo no tiene nada que ver con el odio nazi a los judíos. No odiamos a
los sionistas por percibir en ellos la presencia del ADN judío como dicen los
nazis, sino que los odiamos por lo que hacen. Nos oponemos a los sionistas por
la misma razón que Saladín derrotó a los cruzados, y Qutuz derrotó a los
mongoles. Nos oponemos a los invasores por invasores, por esclavizar y sojuzgar,
no por su ADN o por sus creencias.
Shamir: Ahora bien, son los judíos los que
pretenden que todo el mundo los odia, por lo que son, trátese de elección
divina, de ADN, o de cualquier otro argumento. En realidad, esto no es más que
una faceta de la creencia judía de que son tan maravillosos que todo el mundo
les tiene envidia. El antisemitismo es un mito, un invento, como aquello de que
a las mujeres les mueve la envidia del pene, según Freud, que era muy judío en
este razonamiento delirante. Nadie odia simplemente por amor al odio.
Los nazis, los verdaderos nacional socialistas
alemanes, no los de pandereta a lo Hollywood, no odiaban a los judíos por lo que
son, sino que estaban en contra de los judíos por lo que pensaban que hacían.
Los nazis consideraban que Alemania estaba colonizada por los judíos. Claro, su
modo de colonización era diferente del estilo de los cruzados o de los mongoles;
se apoderaban de una vivienda o una fábrica después de llevarlas a la quiebra, a
la bancarrota, o por fraude, no después de una batalla campal. Pero ¿era eso tan
diferente, al fin y al cabo?, argumentaban los nazis, ya que en 1920, algunos
judíos habían acumulado ya mucho de la riqueza alemana, mientras que muchos
alemanes nativos estaban en la ruina.
En la India británica, Macauley aconsejaba
colonizar de manera duradera con dos ataques mentales: socavando el orgullo
nacional y la educación nacional de los indios de modo que fueran olvidando su
pasado glorioso. ¿Era esto muy diferente de los años 1920, cuando algunos judíos
-dueños de periódicos y maestros del discurso- se empeñaban en ridiculizar y
socavar el orgullo germánico y el estilo alemán de vida?
Tal vez si Guy de Lusignan (derrotado por Saladín)
y Kitboga (derrotado por Qutuz) hubiesen tenido bancos y cortes y diarios a su
disposición, no se hubiesen acercado jamás a Qurn Hattin o a Ain Jalut (donde
les dieron sus respectivas palizas). Para acortar, el punto de vista [de Hitler]
era asombrosamente semejante al nuestro. No te quiero ofender al decir esto: los
nazis querían que los judíos vivieran felices, pero en otras tierras. Tenían
planes de mandar judíos a Madagascar o a Uganda, o de crear un Estado judío en
Europa oriental, para que viviesen felices allá, para siempre. ¿No te cae nada
bien eso de “invadir, esclavizar y subyugar”? lo mismo les pasaba a ellos.
Esta es o fue la posición de la derecha
nacionalista en Europa. Consideraban el ascenso de los judíos, la toma de los
medios masivos por los judíos, la influencia judía en el discurso, el control
financiero judío como una señal de colonización de sus países por los judíos.
Ellos eran como Hamas; pero ahora, al hacer paces con los sionistas, han tomado
el camino de Mahmud Abbas: se han entregado a la fuerza mayor.
Ahora, permíteme hablar claro, sin ambigüedad . El
que argumenta a partir de la tentativa de colonización judía de Alemania, (o
Rusia, o Polonia, o USA) debería rebelarse contra la descolonización a través
del crimen de masa. Cada vez que esto ocurrió, por ejemplo en Haití donde los
dueños de esclavos blancos fueron masacrados por sus esclavos en una oleada de
descolonización, o en la Ucrania occidental donde los polacos fueron masacrados
por los nazis ucranianos, el resultado siempre fue un desastre, la tierra se ha
encontrada arruinada por siglos, y la gente parece cargar con una maldición
durante largas eras.
Yo estoy enteramente a favor de la descolonización
de Palestina, pero no por las matanzas masivas o la expulsión masiva; más bien
por la abolición de privilegios, y con medidas para igualar posiciones. Esta es
la solución ahora en Palestina, y debería ser la solución en cualquier tipo de
colonización.
Saam Amerat: Hablando de soluciones,
creo que en nuestro campo hay tres: la mía, la tuya, y la del resto de la gente.
Estos últimos, incluyendo a Norman Finkelstein, quieren una solución mediante la
vuelta a lo que existió antes de 1967, también llamada solución de los dos
Estados. Nosotros dos creemos que esto no difiere del estilo surafricano de
apartheid. Si los defensores de esta idea se aferran a ella, es porque el
apartheid al estilo surafricano es mucho mejor que lo que les toca hoy en día a
los palestinos. Pero sabemos que Israel nunca aceptará un apartheid al estilo
surafricano, porque los blancos allá trataban a los negros como lo hacían por
creer que los negros eran seres humanos inferiores. Pero los sionistas nunca
garantizarán a los palestinos los derechos de seres humanos inferiores, porque
los sionistas nunca aceptarán a los palestinos como seres humanos.
Tu solución, la del Estado único, la
comparte gente como Craig Murray, es la que regía antes de 1948, después del
mandato británico. Estás abogando por un solo Estado para todos, en tierras
donde los árabes ya han logrado ser mayoría; esto no ofrece ninguna solución
para los judíos que quieran volver a sus tierras en el mundo árabe. La sociedad
israelí se está volviendo cada vez más fascista, no menos, y los gobiernos
árabes se vuelven más complacientes, no menos. La derecha crece por su alta tasa
de natalidad, mientras la izquierda se está marchando a Europa. ¿Entonces, qué
incentivo podría tener Israel para aceptar eso?
Mi solución es la anterior a 1918. Que
vuelva el Medio Oriente a lo que era antes que llegaran los británicos y lo
echaran todo a perder. Esto permitirá a los palestinos volver si lo desean, y a
los judíos igual, si lo desean. Pienso que tu proyecto apunta principalmente a
crear cambios en la sociedad israelí, a hacerla retroceder un paso ante el
Armageddon. Hubo una época en que esto era posible, pero este tiempo ya pasó.
Explicarles a los sionistas que se les está llevando al Armageddon ya no servirá
de nada porque demasiados son los que entre ellos ya creen en Armageddon, ya
tienen Armageddon como su objetivo último. Me estoy refiriendo tanto a los
sionistas judíos en Israel como a los sionistas cristianos que los financian en
América, abarcando tanto los núcleos religiosos de colonos en Cisjordania como
los ateos de derechas en Tel Aviv. Todos se precipitan hacia la catástrofe,
tratando de ser más de derecha y más locos unos que otros; compiten en el
desvarío.
Shamir: Mi conclusión se acerca bastante a la tuya.
Mira mi ensayo “Turquía es la clave” (http://www.israelshamir.net/Spanish/Turkey-Sp.htm
), donde digo que a Palestina la salvará su plena integración en el área, por
desaparición del marco post-colonial. Se podría llegar a la solución de un solo
Estado si los ciudadanos de USA fueran capaces de rechazar el mando conjunto de
Goldman Sachs, Lieberman, Foxman y sus socios. Habría que descolonizar la loma
del Capitolio antes de Ramala. Entonces, democracia e igualdad les llegarían a
Palestina por defecto. Pero los yankis están subyugados. Si no apoyan a los
palestinos es porque no entienden cómo pueden rebelarse contra el mando judío.
No hay mucho que esperar de los nacionalistas de USA tampoco: prefieren admirar
su blanca piel, aun cuando por lo visto el único varón que defiende los valores
[que los blancos creen] blancos en el Congreso es la diputada negra Cynthia
McKinney. Por esto estoy de acuerdo en que la solución la implementarán los
poderes regionales sin ayuda de Europa o USA.
Saam Amerat: La solución se halla ahora fuera de
Israel/Palestina. No exactamente con Irán o Turquía, sino en la unión de ambos,
como una Unión europea del Medio Oriente. Nosotros deberíamos impulsar a los
pueblos del Oriente Medio a cambiar de gobiernos, sin verter sangre, sacando a
dictadores y reyes del poder, con vistas a su reemplazo dentro de un Estado
único. Si dentro del mapa dibujado por los británicos la región hubiera podido
librarse del sionismo, ya lo hubiera hecho. Por eso hay que dibujar un mapa
diferente, de manera a sepultar el sionismo en el basurero de la historia. Un
ejército medio oriental unido será capaz de reunificar Palestina con el resto
del Oriente Medio porque los ejércitos árabes desunidos fracasaron. Y el
potencial económico de un Medio Oriente unido, contando con las fábricas de
Egipto, Turquía e Irán, la riqueza petrolera del Golfo y las verdes tierras de
Sudán, demostraría a los sionistas que trabajando juntos se saca más provecho
que no robando a los demás. Es verdad que los sionistas más rabiosos pueden
estar en América y Europa, y esa gente no desea en absoluto marcharse a Israel.
Sólo quieren que los hijos de gente más pobre lo hagan, para pelear por esa
patria. Quieren atesorar riquezas en sus bancos, mientras los pobres sigan
peleando en unos kibutzes por sus sueños. Sí, Europa y USA son los lugares donde
los sionistas dan y quitan, y allí es donde compran políticos para que los
ayuden. Pero es en Israel donde construyen, y allí es donde quieren que los
judíos trabajen y contribuyan, para dar realidad a su sueño. O sea, que tienes
razón, en Europa y América es donde los sionistas chupan sangre, pero Israel es
el lugar donde lo vomitan en las hambrientas bocas de los colonos. Pero comer
solo produce estreñimiento, por muy egoístas que sea uno; Israel es el lugar
donde se alivian, buscando volver a la salud, con el pretexto de que esto
fertilizará a la devastada economía: pero de toda la mierda que mandan a Israel,
sólo queda el mal olor.
Hablando de unidad y Estado unificado, creo que
cuanto más amplia la unidad, en un área mayor, mejor. Estoy de acuerdo con tu
ensayo, la autonomía es imprescindible para alcanzar esta unidad. Quisiera
agregar que la autonomía tiene que ver con la composición, pues los pueblos
necesitan autonomía en regiones propias. En una zona autónoma, los religiosos
ultra ortodoxos pueden tener sus tiendas cerradas los sábados, en sus propias
aldeas, y mandar a sus hijas a escuelas donde no se admitan sefardíes que las
puedan corromper con los programas de televisión que ven en sus casas, como
dicen. Cada región, cada religión y comunidad debería tener sus propios
tribunales donde se diriman sus problemas entre sí, y el mandato de estas cortes
de justicia debería ser muy amplio, si esto es lo que desean, pues no es nuestro
problema, sino el de ellos. El problema empieza con los matrimonios mixtos en
particular, y las familias mixtas en general. Y para resolver conflictos de este
tipo se necesita una mente más aguda que la mía, pero son problemas que tienen
solución. Tal vez no soluciones que hagan a todo el mundo feliz, pero sí
soluciones más cercanas de la justicia que lo que la situación actual permite.
Shamir: Adoro Irán, pero no veo que Irán pertenezca
al área. Históricamente, Irán no formó parte del imperio bizantino ni otomano.
Irán tiene su propio espacio, ancho, extendiéndose hacia el Asia central,
Afganistán, parte de Pakistán. Dudo que se pueda cruzar las fronteras
civilizacionales.
Saam Amerat: Acerca deIrán, creo que se
le debe incluir para evitar disputas territoriales y disputas acerca del
tratamiento de las minorías entre este país y sus vecinos. La Unión europea
también significa que ya Alemania no necesita invadir a Francia o a Polonia por
considerar que tal o cual territorio le pertenece, porque la Unión significa que
los alemanes ya tienen acceso a estas tierras.
La mejor manera de asegurar los mayores
derechos para los palestinos que deseen regresar sería asegurar que los judíos a
su vez puedan regresar a sus tierras de origen, incluyendo Irán y el Magrez.
Pero Irán podría formar parte de la misma provincia del Estado más amplio, una
provincia que cubra Afganistán (donde la mitad aproximadamente de la población
es tayik, es decir iraní), el Asia central, incluyendo Tayikistán, donde la
población también habla tayik. Esta unidad es necesaria para evitar guerras
separatistas. Porque no todo el mundo es iraní, los azeríes y los turcomanos
hablan un lenguaje que es una variante del turco, mientras que los uzbecos
hablan una lengua que se puede entender en Turquía.
Edición: Ken Freeland; traducción: Maria
Poumier